Reseña histórica

La intuición y el celo pastoral de monseñor Alberto Giraldo Jaramillo, arzobispo de Medellín, hicieron posible la creación de la parroquia San Juan Apóstol. 

Al mirar las necesidades pastorales del Poblado, sector de la ciudad de Medellín que desde un tiempo presentaba un crecimiento importante de la población, con los respectivos retos pastorales inherentes a dicha realidad, quiso examinar la posibilidad de concretar un proyecto de parroquia que ya se venía estudiando con el padre Juan Gonzalo Aristizabal y un grupo de laicos. 

Dada la dificultad presentada por la escasez de terrenos en éste sector de la ciudad y por los requerimientos de parqueaderos por parte de planeación, después de un riguroso estudio, se determinó construir el templo parroquial en una unidad de propiedad horizontal, rompiendo así esquemas y surgiendo de éste modo un nuevo prototipo de parroquia. 

Inicialmente la parroquia comenzó a funcionar en el monasterio de nuestra Señora de la visitación de santa María, donde el proyecto fue acogido con alegría y generosidad por parte de las religiosas; así las cosas, a finales del mes de octubre y principios del mes de noviembre de 2005 se inició desde el convento el trabajo para crear comunidad, base inicial del proyecto parroquia san Juan Apóstol.

La parroquia fue erigida finalmente mediante decreto arzobispal N° 14/EP/2006 del 2 de febrero del año 2006, desprendiéndose de las parroquias de la Visitación, San Lucas, Beato Mariano de Jesús Eusse y la Divina Eucaristía. Se nombró como primer párroco en el mismo decreto al presbítero Juan Gonzalo Aristizabal Isaza. A la parroquia se le asignó la responsabilidad de la misa dominical en los hoteles y centros comerciales, siendo esta una forma de llegar a los alejados e indiferentes y de predicar a Cristo en éstos, que podemos considerar nuevos areópagos en el siglo XXI. 

A la muerte del pbro. Juan Gonzalo Aristizabal en febrero de 2009 (quien inició la construcción del templo), asume como párroco monseñor Carlos Luque Aguilera, mediante decreto N° 02/AP/2009. Él continuó la construcción del proyecto arquitectónico de la unidad parroquial que culminó el día 23 de agosto de 2009 y consolidó la creación de la comunidad parroquial. 

Con una Eucaristía solemne presidida por el señor arzobispo, monseñor Alberto Giraldo Jaramillo, ese mismo día, consagró el templo y se puso bajo la protección de san Juan Apóstol. En el altar reposan las reliquias de los mártires Santa Cecilia, virgen romana del S. III y San Opilio, diácono de Piacenza del S. V. 

Monseñor Carlos Luque, asumió como párroco en propiedad, mediante el decreto N° 18/NP/2010 del 12 de marzo de 2010, conduciendo la parroquia con la ayuda sucesiva de los Pbros. Julio César Zuluaga, Fernando Arturo Maya Toro y Fabián Andrés Loaiza Sánchez, Jesús David Gómez Barco, vicarios parroquiales. 

El presbítero Gustavo Alonso Montoya Montoya asumió como párroco en propiedad, mediante decreto N° 1769N/2018 de fecha 18 de diciembre de 2018 en la ciudad de Medellín por manos del Señor Arzobispo, monseñor Ricardo Tobón Restrepo. 

Soy el Padre Gustavo Alonso Montoya Montoya, hijo de Bernardo Montoya Acosta (+) y Leonisa Montoya Cardona (+). En mi hogar fuimos catorce (14) hermanos, yo soy el último de ellos. Me crié en Sabaneta, donde siempre ha vivido mi familia. Siempre he mantenido contacto con toda mi familia y me siento acompañados por todos, pues tengo bastantes tíos, primos y familia.

Fui educado en un hogar católico, en todos los valores de la fe cristiana: el respeto, la honestidad, el trabajo, la fe, la vida en familia, entre otros muchos. Siempre fuimos cercanos a la parroquia y a las religiosas, especialmente a las Hermanas Oblatas de San Francisco de Sales, eran nuestras vecinas cuando éramos niños.

En la infancia y juventud realicé mis estudios de primaria en Sabaneta y el bachillerato en el Seminario Menor de Medellín. Allí recibí una excelente formación académica acompañada de otros valores y conocimientos. 

Me ha gustado mucho la música y por eso entre la infancia y la juventud aprendí a tocar la flauta y la guitarra. No fui buen deportista, pero me ha gustado el baloncesto, desde pequeño e inclusive con mis hermanos lo he practicado. En la actualidad lo practico por salud.

Me hubiera gustado perfeccionar más la interpretación de los instrumentos musicales y el deporte.

Estudié en el Seminario Mayor, en unión con la UPB, Filosofía y Teología Ya ordenado hice una especialización en Derecho Canónico en la Universidad Lateranense de Roma. Me ha gustado mucho conocer la Palabra de Dios y me hubiera gustado estudiarla de más técnica, pero la vida me ha orientado por estos otros servicios.

Fui ordenado diácono para la Arquidiócesis de Medellín el 3 de diciembre de 1994, quedando incardinado en esta misma Iglesia Particular. Como diácono presté mis servicios en la Catedral Metropolitana y en la Parroquia Santo Domingo Savio, en el sector La Torre.

Recibí la ordenación presbiteral el 25 de noviembre de 1995.

Mi primer nombramiento fue como vicario parroquial de San Judas Tadeo en el barrio Castilla; luego he trabajado como párroco de San Juan Crisóstomo en el barrio Efe Gómez; administrador de la Parroquia la Divina Pastora en el barrio El Salado de Medellín; formador en el Seminario Juan Pablo II a la vez que fui Delegado de Partidas; presté un corto servicio en la Nunciatura Apostólica en Bogotá como secretario local; vicario parroquial de la Parroquia Nuestra Señora de Lourdes en Medellín y formador del Seminario Juan Pablo II; párroco de la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de Medellín; director de la Casa de Medellín en Roma; Administrador parroquial de la Parroquia San Felipe Apóstol en Sabaneta; párroco de la Parroquia de la Veracruz de Medellín; párroco de la Parroquia Santa María de los Dolores de Medellín y actualmente párroco de la Parroquia de San Juan Apóstol de Medellín. Desde el año 2009 he prestado mis servicios como Vicario Judicial y Vicario Judicial Adjunto (actualmente).

En el tiempo libre aunque me gustaría poder hacer mas, me gusta practicar el baloncesto; ir a cine; asistir a actividades culturales y me gusta salir a comer (alguno dice que soy muy comelón). Los fines de semana los dedico a la parroquia y tengo un día de descanso que me queda corto siempre (los miércoles).